IDEARIO DEL CLUB

Tomando el otro día un café con una de nuestras compañeras del Club, le comentaba algo a lo que le vengo dando vueltas hace ya un tiempo. Hablábamos de la publicidad del Club, de lo difícil que es convencer a la gente para que pruebe nuestro deporte, de la ilusión y de la satisfacción que nuestra penúltima (siempre, siempre será la penúltima, lo garantizamos) locura nos estaba regalando.